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SE TRATA DE QUE HAGAS UN RESUMEN CLARO Y PRECISO DE
TUS CONOCIMIENTOS SOBRE EL MISMO. PIENSA QUE SOLO TIENES DOS FOLIOS PARA
REALIZAR TODA LA PRUEBA... HAZ UN ESQUEMA PREVIO, EN CINCO MINUTOS, EN
DONDE RECOJAS LAS IDEAS PRINCIPALES DEL TEMA, PARA EVITAR OLVIDOS
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De 1939 a 1975 España vivió políticamente en el franquismo, es decir,
bajo la dictadura personal del general Francisco Franco, un dirigente
con poderes casi absolutos, ya que concentraba el poder legislativo y
el ejecutivo, además del mando supremo del ejército y del partido único.
Ejerció su poder de manera directa y personal, sin rendir cuentas a nadie,
sólo "ante Dios y ante la historia".
1. Evolución económica. En los años cincuenta la situación creada
por la autarquía económica era insostenible
(bajos salarios, racionamiento, inflación, y estraperlo). La agricultura
era el sector más importante pero su producción era insuficiente. La industria
estaba estancada pese a la creación del INI
en 1941. La sociedad era tradicional y la mayoría de la población pasaba
hambre y estaba descontenta. Se hacía necesaria una apertura para combatir
el estancamiento económico. La Guerra fría significó el fin del aislamiento
internacional gracias al acuerdo firmado en 1953 con Estados Unidos, Tratado
de Ayuda Mutua, por el que proporcionarían ayuda económica a cambio
de instalar bases en España, lo que permitió una recuperación con algunos
cambios: acabó el racionamiento y se liberalizaron los precios y la circulación
de los productos alimenticios. Pero a partir de 1956, la inflación y el
déficit presupuestario crecieron.
Un nuevo gobierno formado en 1957 incorporaba a ministros
tecnócratas del Opus Dei, como Ullastres y Navarro Rubio que
aprobaron el Plan de Estabilización de 1959. El Plan detuvo la
inflación, liberalizó la economía, incentivó las inversiones extranjeras,
recortó el gasto público, restringió el crédito, congeló los salarios
y devaluó la peseta al fijar la paridad en 60 pesetas por dólar. En un
principio estas medidas resultaron socialmente negativas, ya que se redujo
el consumo y la inversión y aumentó el paro. Pero en dos años se notaron
los efectos positivos del Plan y se relanzó la economía que produjo una
rápida y espectacular modernización del país en la década de
los 60.
Fueron los años de los Planes de Desarrollo, siguiendo el modelo
de planificación económica indicativa,
dirigidos por el ministro de Industria López Rodó. Consistían en tres
planes cuatrienales, iniciados en 1964 - aunque el tercero quedó parado
por la crisis de 1973- que coordinaban el crecimiento económico del país.
Se fomentó la implantación industrial con ayudas e inversiones estatales
en infraestructuras en siete polos de desarrollo ( Burgos, Vigo,
La Coruña, Huelva, Sevilla, Valladolid y Zaragoza), zonas atrasadas pero
con posibilidades económicas. Los planes estimularon la industria pero
raramente cumplieron sus previsiones y acentuaron los desequilibrios sectoriales
y regionales. Frente al desarrollo de las zonas industriales (Cataluña,
País Vasco, Madrid y los nuevos polos de desarrollo) otros territorios
quedaron atrasados (Galicia, las dos Castillas, Andalucía, Extremadura).
El régimen usó como propaganda la industrialización presentándola como
el "milagro económico español". España se convirtió en la décima
potencia industrial del mundo. La renta per cápita pasó de 300$ en 1960
( la más baja de Europa), a 1000 $ en 1970. La tasa de crecimiento fue
muy alta, 8,6% anual. Para este cambio estructural fue imprescindible
la migración de la población: cuatro millones de personas realizaron
un éxodo rural desde las zonas deprimidas del campo español hacia las
regiones industriales (País Vasco, Cataluña, Madrid y los polos industriales)
o atraídas por las zonas turísticas de la costa. Dos millones se marcharon
a Europa Occidental en pleno crecimiento industrial debido a la favorable
coyuntura internacional (Alemania, Suiza y Francia), ya que el modelo
español de crecimiento no generaba empleo suficiente para la creciente
población activa.
La balanza de pagos deficitaria
permanentemente, casi enjugó su déficit gracias a tres fuentes de ingresos:
las inversiones extranjeras, las divisas que enviaban los emigrantes
y los ingresos de los turistas extranjeros. Las inversiones extranjeras
suplieron en parte la carencia de capital pero originaron una excesiva
dependencia de los países más desarrollados. El boom del turismo
con 6 millones de visitantes (franceses, ingleses y alemanes, principalmente)
en 1960, que pasarían a más de 30 en 1973 convirtió a España en el segundo
destino turístico de Europa, por detrás de Italia. Los emigrantes en Europa
enviaban sus ahorros a España en divisas, muy importantes para el crecimiento.
El desarrollo económico quedó estancado a partir de la crisis general
de la economía capitalista de 1973.
2. Evolución social. Estas transformaciones económicas produjeron
cambios en la estructura de la población. Se produjo un considerable incremento
demográfico (34 millones en 1970). Entre 1960 y 1973 la España agraria,
rural y tradicional dejaba paso a una España industrial, urbana y moderna,
similar a la de los países de Europa occidental. Cayó el porcentaje de
personas ocupadas en la agricultura y aumentó el número de obreros de
la industria y de empleados del sector servicios (terciarización). También
cambió la estructura social, con predominio de las clases medias urbanas.
El aumento de los salarios- aun siendo bajos respecto a los europeos-
y de la renta per cápita elevó el nivel de vida de los españoles, que
iniciaron la sociedad de consumo. Mejoró la alimentación, aumentó
la construcción de viviendas- aunque no se acabó con el chabolismo y las
ciudades crecieron con barrios periféricos sin infraestructuras adecuadas-,
los hogares se dotaron de frigoríficos, televisores, teléfonos. Las vacaciones
y el automóvil, el famoso Seat 600, estuvieron al alcance de más personas.
La Ley de Bases de la Seguridad Social (1963) hizo que el Estado
garantizara asistencia médica, pensiones de jubilación, y otras prestaciones
a los afiliados, si bien insuficientes. La Ley General de Educación
(1970) ampliaba la escolarización obligatoria hasta los 14 años, lo que
disminuyó el analfabetismo.
Se produjeron también cambios profundos en la mentalidad. Los
jóvenes españoles, en contacto con los turistas extranjeros, la vida urbana
y la televisión (pese a la censura y manipulación continuas), tenían una
concepción del mundo más abierta y tolerante que la tradicional de la
España oficial; buscaban su inspiración cultural en Europa - en modo de
vestir, música, pensamiento. España se secularizó. Las nuevas generaciones
querían libertad no sólo económica sino también política.
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La autarquía: pretendía que el país fuera autosuficiente
económicamente, sin necesidad de depender del exterior. Se caracteriza
por un fuerte intervensionismo estatal. Se debía a que el régimen seguía
modelos económicos de los regímenes totalitarios afines (nazismo y fascismo)
y a su aislamiento internacional desde 1945, al finalizar la Segunda Guerra
Mundial. La política autárquica fue un completo fracaso.
El
INI (Instituto Nacional de Industria): era un holding estatal creado para
impulsar la industrialización del pais, debido a la insuficiencia del
capital privado. Creó numerosas empresas públicas que recibían constantes
ayudas estatales pese a su poca rentabilidad, lo que generó enorme gasto
público.
Los
tecnócratas: buscaban la eficacia técnica y económica, al margen de los
planteamientos políticos e ideológicos del franquismo anterior.
Planificación económica indicativa:
Se inició en Francia, tras la segunda guerra mundial y consistía en una
economía planificada por el Estado que fijaba los objetivos e indicaba
a los empresarios cómo alcanzarlos, ofreciéndoles ventajas económicas
y fiscales si seguían las directrices gubernamentales.
La
balanza de pagos: es el resultado de comparar ingresos y gastos derivados
de los intercambios con otros países.
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3. Evolución política. El régimen franquista fue evolucionando
a lo largo de los años. Pero las profundas transformaciones económicas
y sociales que el país experimenta con el desarrollismo económico no fueron
acompañados de las correspondientes transformaciones políticas. Debido
a la coyuntura internacional, en los años sesenta se notan ciertos aires
de tolerancia sin que desaparezca la dictadura ni la represión a través
del Tribunal de Orden Público (1963).
Se hace una política que busca la eficacia. Los tecnócratas del Opus
Dei cobraron gran protagonismo político, relegando a las
familias tradicionales del régimen- falangistas, militares y católicos
de la Asociación Católica Nacional de Propagandistas.
Se promulgan nuevas leyes, que inician una tímida liberalización:
· La Ley de Prensa (1966), de Manuel
Fraga Iribarne, ministro de Información y Turismo, supuso la desaparición
de la censura previa y una cierta
permisividad en libros y espectáculos.
· La ley de Libertad Religiosa (1967) por la que se reconocía
la igualdad de todas las confesiones
· La Ley Orgánica del Estado (1967), séptima y última de las Leyes
Fundamentales, sometida a referéndum, que intentó dar una apariencia
de liberalización política y aperturismo al régimen franquista, sin modificar
su esencia autoritaria. Por primera vez el cargo de presidente del gobierno
se separaba del de Jefe de Estado. El régimen evolucionaba hacia la llamada
democracia orgánica, un modelo político representativo organizado
en torno al Movimiento Nacional y
sus instituciones.
· En 1969 Franco nombró al príncipe Juan Carlos, hijo de don Juan de
Borbón, su sucesor a título de rey. Su intención era instaurar
una nueva monarquía continuadora del régimen en caso de su fallecimiento.
Don Juan Carlos juró fidelidad a Franco y a las Leyes Fundamentales.
En los años setenta, el régimen se debilitó por la aparición de
dos tendencias en su seno: los inmovilistas y los aperturistas.
Los primeros - militares, falangistas, funcionarios- querían mantener
el franquismo sin cambios, manteniendo las esencias del Movimiento Nacional.
Detuvieron las tímidas medidas liberalizadoras y endurecieron la represión.
Su representante era el almirante Carrero Blanco, presidente de gobierno
en 1973 (asesinado por ETA meses después). Los aperturistas - jóvenes
falangistas de clases medias, demócrata cristianos - veían necesario que
el régimen evolucionara gradualmente creando asociaciones políticas dentro
del Movimiento.
Respecto a las relaciones exteriores, los tecnócratas solicitaron en
1962 el ingreso de España en la Comunidad Económica Europea, pero
no lo lograron porque el régimen no era democrático, sino dictatorial.
Pero consiguieron la firma de un Acuerdo Preferencial en 1970,
con privilegios comerciales. Se concedió en 1968 la independencia a Guinea
Ecuatorial. Se cedió a Marruecos, independiente desde 1956,
el territorio de Ifni (1969) y, tras la Marcha Verde organizada
en 1975 por Hassan II aprovechando la enfermedad de Franco, se repartió
el Sahara español entre Marruecos y Mauritania, en el Acuerdo de Madrid,
sin tener en cuenta al pueblo saharaui. Por último, el intento de recuperación
de Gibraltar terminó en fracaso y el régimen ordenó en 1969 el
cierre total de la frontera (no se volvió a abrir hasta 1982)
4. La oposición al régimen. En los años sesenta y setenta la oposición
al franquismo se fortaleció, organizándose en distintos frentes:
· Oposición obrera: aumentaron las huelgas laborales, con peticiones
de tipo político. Los sindicatos tradicionales (UGT y CNT) tenían escasa
militancia frente a las Comisiones Obreras, creadas por Marcelino Camacho,
relacionadas con el PCE.
· Movimiento estudiantil: las protestas de estudiantes universitarios
fueron en aumento exigiendo libertades democráticas. La más importante
tuvo lugar en 1965; en Madrid fueron expulsados de sus cátedras los profesores
Aranguren, Tierno Galván y García Calvo.
· Un sector de la Iglesia, tras el Concilio Vaticano II, se fue
distanciando del régimen con los nuevos aires de tolerancia y libertad.
Destacó el cardenal Enrique y Tarancón, presidente de la Conferencia Episcopal
desde 1971. Muchos sacerdotes (clero vasco, curas obreros) y asociaciones
católicas (como la HOAC) militaron en la oposición, especialmente en el
PCE.
· La UMD (Unión Militar Democrática) creada por 80 oficiales del
ejército en 1974.
· La oposición de partidos políticos ilegales: el de mayor implantación
social en el interior del país era el Partido Comunista de España (PCE),
dirigido por Santiago Carrillo, partidario del eurocomunismo que defendía
la necesidad de la reconciliación nacional y la democracia. El Partido
Socialista Obrero Español (PSOE), muy minoritario, renovó su dirección
en el Congreso de Suresnes (Francia) en 1974, con líderes del interior
del país como Felipe González, secretario general. Había partidos socialistas
al margen del PSOE como el PSP de Tierno Galván. En la extrema
izquierda surgieron partidos como el PCE-ML, PTE, la ORC, o
terrorista como el FRAP (Frente Revolucionario Antifascista y Patriota).
Los partidos nacionalistas históricos, como Esquerra Republicana
de Cataluña (ERC) y el Partido Nacionalista Vasco (PNV) se
revitalizaron y aparecieron dos nuevos: Euskadi ta Askatasuna (Euskadi
y Libertad, ETA, que surgió de una escisión del PNV en 1959 que
actuó como banda armada desde 1967; su atentado más famoso fue el asesinato
de Carrero Blanco, presidente del Gobierno el 20 diciembre de 1973. Y
Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) nacida en 1974, de centro,
dirigida por Jordi Pujol. El carlismo evolucionó hacia el socialismo
autogestionario. La Democracia Cristiana reunía a diversos partidos
de centro, minoritarios socialmente, con líderes de prestigio,
como Gil Robles, más moderado, y Joaquín Ruiz Jiménez, fundador de la
revista Cuadernos para el diálogo, muy crítica con el régimen. Participaron
en 1962 en el famoso Contubernio de Munich, con otros opositores moderados
y demócratas tanto del interior como del exilio.
· En los años finales del franquismo, surgieron alianzas políticas
entre los partidos de la oposición. La primera fue la Asamblea
de Cataluña, en 1971, que englobaba toda la oposición catalana. En
1974 por iniciativa del Partido Comunista se constituyó en París la Junta
Democrática de España, que integraba a numerosos partidos de izquierda
e incluso personalidades de la derecha democrática, con un programa común
de ruptura democrática para salir de la dictadura. El PSOE por su parte
creó en 1975 la Plataforma de Convergencia Democrática, junto con
la Democracia Cristiana, con un programa muy parecido. Al final, ambos
organismos se fundirían en Coordinación Democrática en 1976, ya muerto
el dictador ( 20 de noviembre de 1975). |
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El
TOP: era un tribunal especial que juzgaba los llamados delitos políticos
o actividades subversivas. Su actuación fue temible, condenó a cerca de
3000 personas.
El
Opus Dei: fundado por José Mª Escrivá de Balaguer en 1928. Era una
asociación de fieles católicos que buscaba la santificación personal de
sus miembros. Adquirió gran importancia en la España de los años sesenta.
La
Asociación Católica Nacional de Propagandistas: fundada en 1909 para
luchar contra el anticlericalismo y difundir el catolicismo, especialmente
a través de la enseñanza. Su periódico fue El Debate, sustituido en época
franquista por el diario Ya
La
Asociación Católica Nacional de Propagandistas:Censura
previa: aunque se aplicó la política de "prensa orientada" por la cual
se podía castigar con multas, secuestros y cierres (caso del diario Madrid,
en 1971) cualquier información que atentara contra el régimen. Se
pasaba de una censura previa a una censura posterior, más peligrosa aún.
Leyes
Fundamentales: las 6 Leyes Fundamentales del régimen eran: Fuero del Trabajo
(1938), Ley de Cortes (1942), Fuero de los Españoles (1945), Ley del Referéndum
Nacional (1945), Ley de Sucesión a la Jefatura del Estado (1947) y Ley
de Principios Fundamentales del Movimiento (1958).
Movimiento
Nacional: es el nombre que recibe el partido único, Falange Española Tradicionalista
y de las JONS (FET y de las JONS) |